Matías es hijo del Ing. Agr. César Tortorella y su background como empresario independiente se ha enfocado en vincular siempre al sector agropecuario con el financiero. Trabajó para el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) como Asesor Externo del Programa Cambio Rural (2005-2013) y desde 2004 es asesor y administrador de empresas agropecuarias. Asimismo, es el director ejecutivo del Fideicomiso Gestionar I desde 2011.

 

Vinculado con Sociedades de Bolsa y SGRs., actualmente preside GestionAR, una empresa con equipo interdisciplinario y amplia experiencia en el sector financiero y agropecuario, en el mercado de capitales y en la estructuración de productos financieros. La empresa cuenta con el respaldo de asesores legales y contables de renombre y con un bagaje de conocimientos detrás que brindan la confianza que todo inversor necesita a la hora de decidir en dónde invertir. Y, como empresa familiar, trabajan de manera complementaria para llevar adelante los proyectos de cada inversionista que se acerca a GestionAR.

 

 “No todo es plata, no todo es inversión financiera”, nos dice Matías Tortorella, antes de comenzar la charla. “A veces sólo se trata de mejorar el proceso que estás haciendo aplicando la inteligencia sobre el lugar más adecuado para llevar a cabo el proceso productivo con  el Know-how conveniente”.

 

- Cómo funciona GestionAR y qué herramientas ofrece la empresa para aquella persona que desea invertir?

Gestionar es un portal. Nosotros trabajamos como asesores, ya sea para el tomador del dinero como para el colocador. Cuando viene una persona o una empresa que desea invertir, buscamos en nuestra boutique de inversión en dónde le conviene colocar ese dinero. El proyecto puede ser agropecuario, financiero, y nosotros lo orientamos. Dentro de eso tenemos una paleta de posibles negocios que algunos gestionamos nosotros mismos y otros recomendamos y, por el otro lado, recibimos empresas, eventualmente pymes, y muchas del sector agropecuario, que necesitan capital de trabajo para determinado proyecto. A veces unimos puntas y, otras, los acompañamos al mercado de capitales, que no es el mercado bancario, es el mercado de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires o de Rosario, mediante Sociedades de Garantías Recíprocas o, directamente, yendo al mercado con colocaciones financieras, fideicomisos.

 

- Tu padre está relacionado estrechamente con la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, y eso es una ventaja por el conocimiento adquirido.

Sí, por la trayectoria que tuvo en la Bolsa. Hoy es consejero por los ganaderos. Esos son nuestros roles más importantes.

 

- Y el destinatario, ya sea el que invierte o el que recibe la inversión, qué beneficios concretos obtiene?

Primero, la ventaja de nuestra trayectoria y de estar inmersos en el mercado. Esto quiere decir que cuando nosotros le recomendamos a un inversor que ponga plata en vacas o en el mercado, es porque hace 40 años que hacemos esto; gestionamos los negocios, vemos los campos, los alquilamos, armamos e inventamos productos, como el primer fideicomiso que hoy está funcionando, el Fideicomiso GestionAR 1, que fue la primera herramienta con esta estructura legal que se lanzó al mercado. Empezamos con esto en el 2008 y este fideicomiso salió en 2011. Creo que evangelizamos. Nosotros íbamos a abrir cuentas a los bancos y no sabían cómo abrir una cuenta de fideicomiso. Este es un sector que conocemos de toda la vida y del cual somos parte. Cuando el inversor se pregunta por qué ponemos plata en un determinado negocio o por qué lo recomendamos, generalmente es por eso, porque lo conocemos. Estamos adentro del negocio y sabemos qué renta podemos sacar, cuáles son los riesgos y los beneficios. No todo es color de rosa y, en todos los negocios, aparecen riesgos, pero nosotros los explicamos, les contamos nuestra propia experiencia y todo eso le evita al inversor dolores de cabeza porque nosotros ya hicimos punta y abrimos el camino.

 

- Entonces, podemos hablar de inversiones a largo plazo, con un acompañamiento a largo plazo también.

Claro, lo primero es conocer al inversor y saber qué es lo que quiere. Si quiere una inversión de corto plazo, trabajamos en ese sentido y, si pretende trabajar en el largo plazo, también los acompañamos, pero lo más importante para nosotros es conocer qué desea hacer el inversor con su dinero y, en base a eso, lo asesoramos. Aquí te encontrás siempre con un inversor diferente: una mamá que está pensando en sus dos hijos y en su retiro, una persona mayor, un joven que quiere algo de corto plazo y mucho riesgo…

 

- Y cómo es esto de trabajar con la experiencia adicional de un padre especializado en Pymes y que además es ingeniero agrónomo?

Nosotros siempre trabajamos en empresas familiares. Yo empecé en 1998 en la empresa de mis tíos, aprendiendo otros negocios, y llegó el año 2007, cuando mi padre se retira del ámbito privado y junto a mi hermana nos incorporamos a este verdadero equipo. Crecimos con eso, lo llevamos en la sangre, es natural y aprovechamos la  sinergia, la experiencia de cada uno y el know how de cada uno en beneficio de la empresa. Trabajamos con Florencia Tortorella, mi hermana, porque se especializa en comunicaciones. Tiene un máster, es profesora titular en la UADE y está muy preparada, por eso es parte de nuestro negocio. Yo trabajo en un pool de siembra y en negocios agropecuarios desde que me recibí. Hice un máster en Business y Finanzas en el mercado de capitales, por eso formo parte del negocio. Tenemos a María Julia, que es abogada, especialista en Contratos y Fideicomisos, es decir que cada uno cumple un rol de acuerdo a lo que le gusta hacer y es bienvenido para la sinergia de la empresa familiar. También tenemos otros hermanos que hacen otras cosas y no trabajan en la empresa. Lo importante es hacer lo que te guste y trabajar con la gente que vos querés, y si esa gente es la familia, mejor. Con mi padre sucede lo mismo, cuando decidimos incorporar la parte de mercados de capitales dijimos “adentro del barco, César”.

 

 “La ventaja comparativa que tiene

la Argentina es única”

 

- Se viene el Blanqueo y me imagino que podés hacer un llamamiento a todo pequeño o gran inversor que quiera mirar hacia el campo. Por qué tendrían que invertir en los Agronegocios, cuáles son las potencialidades de la Argentina?    

Desde hace más de 5 generaciones la argentina sabe hacer una sola cosa, es estar en el campo, criar vacas, sembrar… Después, podemos vender celulares, autos, lo que ustedes quieran, pero viene todo de afuera. Aquí tenemos un know-how y una ventaja comparativa impagable que es lo que nos mostró el ingeniero Vilella en nuestras jornadas en la Bolsa (ver nota “El agro en la Bolsa”). A nosotros nos enseñan en las universidades sobre las ventajas comparativas y competitivas. La más importante es la comparativa. Estamos parados sobre una mina de oro: agua en el subsuelo, muy buena tierra y, lo más importante, capacidad humana. Tenemos una capacidad humana en el agro que no existe. En la Pampa todos saben andar a caballo, enlazar, encontrar un ternero, subirse a un tractor. Tienen una calificación superior. He tenido la posibilidad de viajar para visitar otros campos y la verdad es que lo que tenemos en la argentina es superior. Personal, tecnificación y especialmente conocimiento. No existe en otra parte del mundo; si esto le sumas la tierra y las potencialidades, la ventaja comparativa que tiene la argentina es única. Este es el momento por las necesidades de crecimiento de alimentación y proteínas en el mundo. Si adicionamos una buena política macroeconómica mirando al mundo, estaremos en la vidriera. Lo único que nos resta a nosotros es hacer las cosas bien.

 

- Mirando el área Pacífico especialmente, no?

Al área Pacífico como área potencial de los próximos 50 años, porque hoy, nuestro principal vecino, Brasil, tiene 200 millones de personas que comen y dentro de los Brics es de los más importantes. Está al lado, no lejos como China o India.

 

- Pero los paises que forman el BAPU ya tienen una ganadería importante, incluso gracias al conocimiento aplicado por argentinos en esos países.

Fuimos pioneros en capacitarlos, pero aún tenemos ventajas comparativas sobre ellos. La hacienda que tiene Brasil no es la misma que la nuestra, no es la misma calidad. Un Angus de la región pampeana no es lo mismo que un Brahman. Ese novillo blanco de Brasil tiene un sabor y terneza diferente, por algo hoy vemos ventas de novillos Angus y Beresford. Pasa lo mismo que lo que pasó con los vinos. No es lo mismo tomar un Malbec de Mendoza 2012 con barril de roble que tomar un vinito que se hizo en no sé dónde. Lo mismo pasa con los granos y la carne. No es lo mismo comer un novillo Angus terminado a pasto y asfalta en la región pampeana, que comer unos novillos del Feedlot. Es muy importante la dieta del animal. Si vas al supermercado verás una marca Premium que dice Angus. Es una góndola aparte. En Europa hay una góndola más, la orgánica.

 

- Ellos se fijan incluso en cuál es la huella de carbono que dejó el producto hasta llegar a sus manos, y eligen en función de eso.

No es lo mismo comer una carne que nació con una trazabilidad, en la pampa húmeda, que comió solo pasto y alfalfa; que fue bien cuidada, que no tiene anabólicos ni antibióticos. Esa carne vale cuatro veces más y ese mercado Premium está en China, Europa y en todo el mundo. Nuestra producción está más preparada para ese segmento, porque es muy buena en calidad.

 

-No nos hemos dado cuenta de nuestras fortalezas.

Más o menos, algunos nos damos cuenta. 

 

- Los productores llegan a ustedes o ustedes los buscan?

En algunos casos nosotros somos los productores o sinergizamos a ese tipo de productores para que hagan alguna diferenciación. En los años difíciles, que fueron los anteriores, donde no había salida, había que buscar diferenciación sino estabas muerto. Nuestro rol es marcarle al inversor este camino y a la pyme poder buscarle también esa diferenciación para que deje de ser una pyme más.

 

- Se generan situaciones de asociatividad?

En el agro hay un montonazo, especialmente porque hay dos redes muy importantes, la del INTA y la de CREA, que son los consorcios regionales agropecuarios. El INTA, con su Programa Cambio Rural, nuclean a productores agropecuarios de diferentes lugares.

 

- Por qué tenemos que pensar en la inversión productiva, en la inversión en el campo?

Algunos dicen que la inversión agropecuaria, ganadera, es una inversión a largo plazo y riesgosa. Lo que hay que tener en cuenta es que en el mismo sector hay diferentes tipos de nichos para todos los que quieren diversificar a corto o largo plazo.

 

- Dame un ejemplo.

Por ejemplo, si decimos vacas, el largo plazo es una vaca de cría, que tiene que nacer, criarse, preñarse, parir su ternero. Pero yo puedo meterme en parte de ese proceso y comprar el ternero de 180 kilos, engordarlo rápido en un Feedlot en 90 días, y venderlo. En 60 días tengo un negocio. Entonces, dentro del mismo negocio, hay un señor que puede invertir a largo plazo en la vaca de cría y, otro señor, que puede invertir en el corto plazo y sólo en parte del proceso.

 

- Y cuál es el perfil del inversor que estás viendo?

Es el que tenía miedo y estaba en un plazo fijo o con dólares debajo del colchón.

 

- Tienen idea de qué es GestionAR?

Un 80% de los nuevos inversores no conocen esto y los tenemos que capacitar, por eso lo acompañamos, le mandamos informes mensuales y nos reunimos con ellos. Ellos tienen dólares y ven que el dólar ahora no se mueve. Hay inversores de 10 mil dólares y otros de 500 mil. Quieren diversificar y no saben en qué. Nosotros lo acompañamos en la inversión de algo que no conoce y lo sacamos de su zona de confort.

 

“Un Angus de la región pampeana no es lo mismo

que un Brahman de Brasil”

 

- El argentino cree en el plazo fijo pero recuerda el corralito. Qué garantías le das vos a esa persona que se acerca son sus dólares a invertir?

Dependerá del riesgo que quiera tomar. Las garantías dependen del riesgo que asuman. Hay negocios que no tiene garantía, son de riesgo. Podemos sembrar y ganar el 30% en dólares, pero puede irnos mal, entonces, afrontamos los riesgos con seguros climáticos, financieros, y le acortamos el riesgo. Es un negocio de economía real. Hay otros inversores que no quieren tomar ese riesgo. Hay productos que pagan renta fija, en los que ganan el 10%. En base a eso, nuestro producto, que es el fideicomiso, lo dividimos en dos, la ganadería y la agricultura, que es más riesgosa. Podemos poner mitad y mitad en cada lugar, tomamos distintos tipos de seguros para mayor tranquilidad y otras herramientas financieras que se le pueden agregar para que se vaya acotando el riesgo. Por ejemplo, un seguro por el tipo de cambio se toma en la Bolsa de Comercio de Rosario, el Rofex, así queda cubierto e invierte en el negocio agrícola y, a su vez, el negocio agrícola tiene su seguro de precio por granizo, inundaciones. Uno advierte los costos, le baja el riesgo aunque rinde un poco menos.

 

- Cuáles son los casos exitosos del fideicomiso1?

Que hay más de 100 inversores que no tuvieron ningún problema por la calidad de inversores que generamos. El caso de éxito es ésta trayectoria. Todos están contentos porque se armó un grupo de trabajo y de inversión, una comunidad que trabaja en forma armónica.

 

-Un bonista puede pensar en invertir en este negocio?

Lo primero que le preguntamos es qué quiere. Normalmente el bonista tiene una inversión inmobiliaria y financiera, los bonos. Tiene un negocio o una industria. Le plantearíamos diversificar más. Generalmente el bonista es alguien muy conservador que ya tiene hecho su patrimonio, que cobra su renta; no se trata de una persona abierta al riesgo, entonces, ahí le planteamos otro negocio que lo saque de otros riesgos.   

 

- Además tenés una doble función porque como ciudadano estás fondeando al sistema con inversión productiva, no especulativa.

Muchos piensan eso, y es real. Hay gente cansada de la parte financiera e intangible. Esto es tangible, el inversor puede ir al campo e incluso lo pueden esperar con un asado. Sabe que está dando trabajo, dando empleo indirecto, haciendo algo por el país. La producción nos da un sentido de pertenencia y eso es lo fundamental. Es inversión productiva, eso es genial.

 

Fuente: @NetNewsArg