Tomar el toro por las astas
Argentina debe hacer de la exportación una política de Estado y debe definir al sector externo de la economía como área estratégica en donde fuertes improductividades deben ser identificadas y eliminadas, en el marco de una integración inteligente con el mundo.
Para ello resulta clave -entre tantas otras cosas- invertir en infraestructura, toda vez que las turbinas del país vienen representadas por el sector agroindustrial, los hidrocarburos, las energías alternativas, el turismo, la minería, y la industria del conocimiento.
Hay también turbinas de menor potencia, tales como la pesca, la forestación y las manufacturas de origen industrial (MOI) relacionadas a los sectores mencionados.
Todos estos sectores requieren importantes dotaciones de inversión directa extranjera (IDE) en proyectos de infraestructura, toda vez que la operación de los mismos puede significar un negocio de alta rentabilidad para quienes los financien, además de brindar sustentabilidad a quienes hagan uso de la infraestructura.
Claro está, Argentina debe abandonar sus regresivas y cuasi prehistóricas políticas relacionadas a “vivir con lo nuestro” y tirar a la basura las anteojeras ideológicas que tanto daño le han causado al país durante décadas.
En mi barrio, a eso se lo llama tomar el “toro por las astas”.
Aquí van algunos ejemplos. Mucho se habla de la Ruta de la Seda de nuestros amigos chinos. Chile y Uruguay -entre muchos otros países- ya han firmado el MOU para integrarse al proyecto BRI (Belt Road Initiative). Hoy China construye en el país a ritmo tortuguesco dos represas hidroeléctricas, pretende levantar 2 plantas nucleares, e interviene moderadamente en la renovación del FFCC Belgrano. Está mal todo esto?
Por supuesto que no; aunque requiere otro dinamismo y mayor conexión con la oferta exportable. Sin embargo, el BRI es mucho más que eso, sobre todo desde el momento en que Chile y en menor medida, Uruguay, han decidido unirse al proyecto. Chile significa integración económica y física con proyección al Pacífico, y Uruguay representa el destino preferido de capitales argentinos para invertir en proyectos productivos y de infraestructura.
"Claro está, Argentina debe abandonar sus regresivas y cuasi prehistóricas políticas relacionadas a “vivir con lo nuestro” y tirar a la basura las anteojeras ideológicas que tanto daño le han causado al país durante décadas."
En otras palabras, Argentina requiere menos bases de observación científicas y SWAPS, y más infraestructura que esté destinada a generar productividad y proyección exportable. Por qué no diseñar y desarrollar dos corredores bioceánicos que acerquen la producción nacional al Asia-Pacífico a partir de la conexión terrestre con puertos chilenos, todo lo cual abriría un enorme espectro a la oferta exportable tanto como a la importación productiva? (léase materias primas y bienes de capital y NO juguetes, paraguas y bolitas de vidrio).
Acaso el BRI no estaría interesado en desarrollar corredores que les asegure un tráfico más operativo a sus flujos comerciales (ida y vuelta) por medio de la construcción y combinación operativa de FFCC, transporte fluvial, y bitrenes con plataformas logísticas digamos en Zapala? Acaso no podríamos concretar el demorado proyecto TUNEL DE AGUA NEGRA o similar en San Juan para conectar Porto Alegre con Coquimbo en el Pacífico y así generar corredores de intercambio comercial?
Acaso a Chile no le interesaría llegar a África Occidental con sus productos por medio de Argentina y contactos comerciales conjuntamente gestionados en el MERCOSUR?
Ahora bien, si Neuquén, Chubut, Río Negro y Santa Cruz va ir cada uno con sus condiciones y regulaciones particulares para tal o cual industria (ej. minería / energía), y del mismo modo el Nuevo Cuyo junto al NOA / NEA va a pretender regular individualmente sus infraestructuras y desarrollos de proyectos, entonces estamos en problemas.
Todo esto es como tratar de combatir la inflación sin una política integral del gobierno. Si sólo vemos lo monetario sin observar lo fiscal y lo externo, entonces nunca se va a solucionar. Resultados a la vista, verdad?
La plataforma logística de ZARAGOZA en España (PLAZA), nació hace más de 20 años en un paraje solitario, abandonado, y sin valor comercial aparente. Sin embargo, a un político se le ocurrió diseñar lo que es hoy un exitoso clúster logístico en donde corporaciones de la talla de ZARA o CALADERO han instalado sus producciones basados en conectividad física, equidistancias con Valencia, Barcelona, Bilbao y Vigo, la pista de aterrizaje más amplia de toda España que fuera utilizada por los aviones americanos durante el Plan Marshall, y hasta conectividad fluvial (hoy ya en desuso).
Hasta la universidad MIT instaló allí un centro de formación gerencial. Se creó valor, se creó empleo, se realizaron transformaciones industriales de valor cuando España rondaba el 30% de desempleo. Hoy es un éxito a todas luces.
Acaso no se puede pensar algo similar para la puerta norte de la Patagonia? para la región del NOA, e incluso para el NEA en Formosa o Chaco y todas las economías regionales largamente postergadas para que puedan ganar productividad con la hidrovía? Basta con hacer mención al reciente acuerdo RCEP que nuclea más de 2200 millones de personas y el 29% del PBI global con jugadores de la talla de China, Japón, Australia, Corea del Sur, Nueva Zelanda, Vietnam, Tailandia, Filipinas, Singapur, Indonesia y otros. Vale decir, un mercado inmenso y plagado de oportunidades de inversión, asociación, y desarrollos conjuntos.
Para aquellos que dicen que la multilateralidad y la globalización se está acabando, pues bien, aquí va una muestra potente de lo contrario. Nosotros no podemos poner más en duda el acuerdo MERCOSUR-UE ni tampoco mirar de afuera la ALIANZA DEL PACÍFICO como si fuera un cuadrangular de fútbol al cual no clasificamos.
Otro ejemplo dentro de la relación con China: mucho se habla del turismo como una turbina de Argentina. China bien podría, ser un enorme cliente a la hora de establecer vuelos y contingentes de turistas diseminados en todo el país - reconocido por los propios funcionarios como un tema de enorme potencial en la generación de divisas y sobre el cual se está trabajando. Sin embargo, la oferta aérea local no para de disminuir, los aeropuertos secundarios brillan por su ausencia, los sindicatos concentran su poder en Aerolíneas Argentinas, todo lo cual se puede simplificar con una palabra: vivir con lo nuestro o nivelar para abajo -todo lo cual es exactamente lo opuesto a lo que se plantea en el RCEP o Regional Comprehensive Economic Partnership- pensado para generar economías de escala, ganar productividad y fortalecer alianzas estratégicas.
El país requiere con desesperación proyectos audaces e innovadores.
No creo que falten candidatos para invertir en los mismos. En todo caso, falta visión, estrategia, y liderazgo en la clase dirigente - ampliamente hablando.
Por Alejandro Arroyo Welbers. PhD - MBA - MSc.
Director Maestria ITBA. Director Diplomatura UNIV. AUSTRAL.
Fuente: www.NetNews.com.ar
COMENTARIO
0 comentarios
IMPORTANTE: Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.