Cae la actividad industria un 0.3%. Pocas señales de una recuperación robusta y sostenida a corto plazo.
La industria argentina sigue luchando contra vientos en contra, pero octubre de 2024 dejó algunas señales de recuperación, a pesar de que los números interanuales no son del todo optimistas. Según el informe de la Fundación FIEL, la actividad industrial registró una leve caída del 0.3% en comparación con el mismo mes del año anterior. Sin embargo, a nivel mensual, ajustado por estacionalidad, se observó un incremento del 0.5%, lo que sugiere una ligera mejora respecto a septiembre.
En términos interanuales, tres sectores se destacaron positivamente.
- La refinación de petróleo, impulsada por una mayor producción en la planta de YPF en La Plata, presentó un aumento notable.
- La industria de alimentos y bebidas mostró un desempeño más fuerte, en parte gracias a la producción de aceite de soja y girasol, la faena vacuna y una desaceleración en la caída de la lechería. En el caso de la faena vacuna, los exportadores mostraron un dinamismo sostenido, lo que permitió una mejora interanual por segundo mes consecutivo.
- Pero quizás uno de los avances más significativos se dio en la industria automotriz, que registró una ligera mejora en octubre y alcanzó el mayor nivel de producción en 11 meses. Las exportaciones del sector, especialmente hacia Brasil, marcaron el mayor avance interanual desde octubre de 2022, lo que refleja una recuperación del mercado regional.
A pesar de estos puntos positivos, el informe también revela los sectores que siguen arrastrando la producción industrial hacia abajo.
- La producción de minerales no metálicos –insumos clave para la construcción– continúa su declive, afectada por el encarecimiento de los costos en dólares y la corrección de la brecha cambiaria.
- Otro de los sectores con problemas es el de las industrias metálicas básicas, que sigue siendo golpeado por la debilidad de la siderurgia, aunque algunos segmentos vinculados a la energía, como la producción de materiales para energía renovable, muestran una leve mejora.
- La metalmecánica presenta resultados dispares. A pesar de los retrocesos en el sector, algunas actividades, como la producción de maquinaria agrícola y carrocerías para vehículos comerciales, lograron registrar avances, alimentados por una leve mejora en las ventas.
- Los insumos plásticos y químicos tienen un balance mixto, destacándose la recuperación de los agroquímicos, que se vieron severamente afectados por la sequía del año pasado.
Recuperación lenta y perspectivas inciertas
Si bien el Índice de Producción Industrial (IPI) de octubre muestra señales de recuperación, estas son aún débiles. En términos desestacionalizados, la producción industrial creció 0.5% respecto al mes anterior. Aunque desde abril de 2024 se ha iniciado un proceso de recuperación, el dinamismo sigue siendo bajo. De hecho, si se anualiza la mejora, la industria alcanzaría un crecimiento de 11.2%, un ritmo inferior al de recuperaciones previas, donde se observaban incrementos de hasta el 18.9%.
Además, la difusión sectorial de la recuperación sigue siendo baja. Solo el 30% de la industria mostró mejoras en el último trimestre, lo que indica que la recuperación no está siendo homogénea ni generalizada, y sigue dependiendo en gran medida de unos pocos sectores clave.
En el acumulado de los primeros diez meses de 2024, la caída industrial alcanza un 9% en comparación con el mismo período de 2023, con sectores como los minerales no metálicos y la producción automotriz encabezando las pérdidas. Mientras tanto, la refinación de petróleo muestra un leve crecimiento del 0.9%, ayudando a mitigar las caídas en otros sectores.
Las perspectivas para el resto del año dependen en gran medida de la evolución de factores como la inflación, la competitividad cambiaria, y las políticas internas que afecten a la producción y la inversión. Si bien algunos sectores, como la producción de alimentos y la automotriz, muestran señales de fortaleza, la industria en general sigue atravesando un período de incertidumbre, con pocas señales de una recuperación robusta y sostenida a corto plazo.
Apesar de algunas luces de esperanza en sectores estratégicos, la industria argentina enfrenta un panorama complejo. Las señales de recuperación son claras en ciertos segmentos, pero los desafíos estructurales persisten, lo que hace difícil vislumbrar una reactivación amplia. En este contexto, la industria sigue siendo clave para la economía nacional, pero su recuperación dependerá de un esfuerzo conjunto entre el sector privado y el público para abordar los problemas de competitividad, inflación y brecha cambiaria.
Fuente: www.Netnews.com.ar
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